Autores: Andrea Lamprea / Daniel Ocampo
El Acuerdo Final firmado el 24 de noviembre del 2016 entre el Gobierno de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia- Ejército Popular (FARC-EP) abrió las puertas para la creación de oportunidades para la expansión del mercado y las inversiones en desarrollo rural, siendo este uno de los sectores más afectados durante los más de 50 años de conflicto interno del país. Se reconoce que para conseguir los resultados esperados es indispensable una cooperación estratégica entre el gobierno, la sociedad civil y el sector privado, para crear oportunidades laborales sostenibles en las zonas rurales de Colombia. Como respuesta a esta necesidad, Caritas Noruega bajo un acuerdo de financiación con la Agencia Noruega de Cooperación para el Desarrollo (NORAD) y en consorcio con El Secretariado Nacional de Pastoral Social / Caritas Colombia(SNPS/CC), YARA y ECOM CCA S.A.S. (ECOM) que en cooperación con el Insttuto Noruego de Bioeconomía Investgación(NIBIO) se propusieron implementar un proyecto para promover el crecimiento inclusivo en el sector agrícola más grande de Colombia, mediante la introducción de práctcas innovadoras en el sistema de producción y manejo del café, en los departamentos del Huila y Cauca.
En este contexto LPIC inicia la evaluación del proyecto “Mejorar los medios de vida de los pequeños productores de café mediante innovaciones en la cadena de valor del café en Colombia”, para lo cual el equipo evaluador desarrolló un enfoque metodológico mixto, usando herramientas de recolección Cualitativas y Cuantitativas. Se realizaron entrevistas, grupos focales con los participantes y con los implementadores, visitas a los territorios involucrados y también se realizaron encuestas para entender la percepción de los actores frente a los resultados del proyecto.
Dentro de los hallazgos principales del proyecto el equipo evaluador pudo evidenciar que la intervención esta en línea con las problematicas de los territorios y así mismo permitió la participación de las mujeres y de los jóvenes, aumentando su involucramiento dentro de los procesos de cultivo como de los procesos sociales; aun cuando los requisitos para la selección de los participantes se enfocaron en requerimientos técnicos.
Si bien hubo una estructura vertical que no permitió una mayor articulación entre las organizaciones implementadoras, lo que ocasiono que los participantes creyeran que se trataba de dos proyectos distintos (SNPS/CC y ECOM), uno enfocado en los aspectos técnicos y ambientales y otro enfocado en los aspectos sociales, es importante tener en cuenta que la calidad de vida de los beneficiarios en el proyecto mejoró y además se logró un fortalecimiento en el tejido social, como lo menciona uno de los participantes:
“...Hace 3 años negociamos una finca y yo estaba preocupado de no poder pagarla, pero sí se logró y ya incluso hicimos una casa nueva, la mejoramos y eso hace que uno ya esté mejorando. Hace un año yo debía más de 60, este año ya estoydebiendo solo 10...”, (Caficultor, cauca)
Finalmente, en el proceso de evaluación del proyecto se pudo evidenciar la importancia de establecer relaciones cercanas entre el equipo técnico de las organizaciones implementadoras y los participantes, para el desarrollo optimo del proyecto, asi mismo se hizo evidente la relevancia que tiene el involucrar a distintos sectores de la sociedad, como el privado y el social, como estrategía para trabajar conjuntamente y reconocer las necesidades de los distintos actores y promover el intercambio de conocimientos, contribuyendo al cumplimiento de un único objetivo: Mejorar los medios de vida de los caficultores.